Estudio de académicos Díaz y Hansen revela el impacto financiero de los retiros de fondos de pensiones

Entre los hallazgos, se da cuenta que las acciones y bonos nacionales sufrieron presiones de venta. En el primer retiro, la intervención del Banco Central en el mercado de bonos y la liquidación de activos por parte de las AFPs en el extranjero aminoro estos efectos. Se identificaron impactos significativos, en el mercado de bonos durante los tres retiros y en el mercado accionario en el tercer retiro.
Las AFP liquidaron las acciones con un rendimiento más débil y bonos de menor calidad crediticia.

En julio de 2020, se introdujo por primera vez una modificación a la Constitución que permitió que los trabajadores pudieran retirar hasta un 10% de sus fondos previsionales, acción que se repetiría en diciembre de 2020 y julio de 2021. Del total de la fuerza laboral activa, solo el 3% de los trabajadores no retiró fondos.

Con el fin de analizar el impacto financiero de los tres retiros en el ámbito local, los académicos del Departamento de Control de Gestión y Sistemas de Información y de Administración de la FEN U. de Chile, Juan Díaz y Erwin Hansen, desarrollaron la investigación “Price effects of asset forced sales during massive pension funds withdrawals”, publicada en la revista académica International Review of Financial Analysis.

La investigación señala que los retiros masivos obligaron a las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) a liquidar activos de sus carteras -un 20% del PIB-, en un corto periodo de tiempo: 40, 20 y 15 días hábiles para el primero (USD 13 mil millones), segundo y tercer retiro (USD 10 mil millones cada uno), respectivamente, generando ventas forzadas, que afectaron negativamente los precios de los activos, en especial en los segmentos con menor liquidez. Del total de estas liquidaciones, la mitad se realizó en mercados internacionales y la otra en el mercado nacional.

El académico Juan Díaz sostuvo que “el retiro de los fondos de pensiones tuvo un impacto negativo en los mercados financieros, que solo la intervención del Banco Central y la diversificación internacional de los fondos pudo contener”.

Efectos en los precios de las acciones y bonos bancarios

La investigación destaca que los retiros desequilibraron el mercado financiero mediante la venta forzada de activos, provocando caídas en los precios, enfatizando que esto plantea riesgos sistémicos significativos para la economía.

En el caso de las acciones, el artículo señala que se observaron presiones de venta durante el tercer retiro, lo cual se tradujo en una caída del precio promedio de las acciones en alrededor de un 8%.

Sobre los bonos, el estudio identifica presiones de venta significativas en los tres retiros, pero inesperadamente se observó un aumento de precios en el primer y segundo retiro, mientras que una caída de precios en el tercero. En el primero, los precios de los bonos aumentaron 0,4% y los rendimientos disminuyeron un 8%. En el segundo, se estimó un impacto positivo más débil en los precios de los bonos (0,26%), pero sin un efecto estadísticamente significativo en los rendimientos. Para el tercero, el impacto estimado en los precios de los bonos fue negativo (0,29%), aunque no estadísticamente significativo; mientras que los rendimientos de los bonos experimentaron un aumento significativo del 18%.

El hallazgo de un efecto positivo y significativo en el precio de los bonos tras el primer retiro de pensiones se explica por “la intervención del Banco Central, que inició un programa especial de compra de bonos bancarios para compensar el impacto financiero de los retiros”, señala el documento.

Esta intervención, que se extendió por 40 días, tuvo “un impacto duradero en los precios de los bonos, dado que generó una garantía implícita ante eventos adversos futuros que hicieron que finalmente los inversionistas aumentaran su valoración”, añade.

En el segundo y tercer retiro, donde no hubo intervención de igual magnitud, por parte del Banco Central, los efectos positivos fueron más débiles o negativos.

“Estas intervenciones generan externalidades negativas al desestabilizar los precios de los activos y distorsionar el funcionamiento del mercado. Equilibrar estas disyuntivas es crucial desde una perspectiva política”, indica.

En cuanto al sistema de pensiones, el documento señala que “la diversificación internacional de las carteras de los fondos de pensiones contribuyó a absorber estos retiros; por lo tanto, promover la diversificación de carteras también es importante”.

¿Qué activos fueron liquidados?

La investigación señala que, en el caso de las acciones, las AFP fueron menos propensas a vender acciones con buen rendimiento, y consideraron aquellas que mostraron un desempeño más débil en los meses previos, lo que sugiere una selección de acciones para la venta en ese momento.

Sobre los bonos, los resultados dan cuenta que aquellos menos riesgosos y de largo plazo enfrentaron menores presiones de ventas. En cambio, los bonos de bancos más grandes, medidos por capitalización de mercado, tenían más posibilidades de ser vendidos.

“Los fondos de pensiones liquidan preferentemente las acciones con un rendimiento reciente más débil. En el caso de los bonos, variables como el plazo del bono o los indicadores de riesgo del bono (calificación y diferencial) también parecen explicar las presiones vendedoras, lo que indica cierta preferencia por parte de los fondos de pensiones por liquidar bonos de baja calidad”, dice el estudio.