Centro de Microdatos y Ministerio de Desarrollo Social lanzan cuarta Encuesta Longitudinal de Primera Infancia

La cuarta versión de este seguimiento a las infancias, que se realiza desde 2010, busca comprender el efecto de las características del hogar, del o la cuidadora principal, y del entorno cercano del niño o niña durante su trayectoria de vida. "Sabemos la importancia de hacer un buen trabajo, pues sus consecuencias tendrán efectos concretos en el diseño de las políticas públicas que garanticen el pleno desarrollo de las generaciones futuras", señaló Lorena Flores, directora ejecutiva del Centro de Microdatos de la Universidad de Chile, organismo que realizará el trabajo de campo del estudio.

 

A través del Seminario “Distintas perspectivas sobre el aporte de la Encuesta ELPI”, el Centro de Microdatos de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile y la Subsecretaría de Evaluación Social del Ministerio de Desarrollo Social y Familia, anunciaron oficialmente el lanzamiento del trabajo de campo de la cuarta ronda de la Encuesta Longitudinal de Primera Infancia (ELPI).

 

Los representantes de las instituciones participantes abordaron la importancia del seguimiento a las infancias que se ha aplicado desde el año 2010, por medio de preguntas a los niños, niñas y adolescentes y sus cuidadores o cuidadoras. Explicaron, asimismo, que sus resultados permiten realizar una caracterización y análisis del desarrollo de estos niños y niñas a lo largo de su nacimiento, infancia y adolescencia, con lo que se espera comprender el efecto de las características del hogar, del o la cuidadora principal, y del entorno cercano del niño o niña durante su trayectoria de vida. De esta forma, la ELPI ha generado evidencia estadística importante para la investigación nacional sobre desarrollo infantil y sus determinantes.

 

El seminario contó con la participación de Paula Poblete, subsecretaria de Evaluación Social, quien destacó la trascendencia de este seguimiento y su influencia en la implementación de políticas públicas. “Este tipo de indicadores resultan súper importantes para ir monitoreando el quehacer del Estado respecto de sus propias intervenciones y de las políticas que va dirigiendo a la infancia y a adolescencia”, señaló la autoridad.

 

Desde la perspectiva académica, el profesor del Departamento de Economía, Esteban Puentes, planteó la importancia de contar con datos sobre la infancia para comprender las brechas socioeconómicas: “es muy importante documentar, entender dónde se producen las brechas, por qué se producen esas brechas, sobre todo en primera infancia porque tienen implicancias de largo plazo” y en ese sentido, recalcó que tener buenas políticas de primera infancia, genera efectos positivos en educación, empleo, salario, disminución de la criminalidad, etc.

 

Desde el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), uno de los más importantes actores sociales en torno a las infancias, reconocen que este tipo de seguimiento a lo largo de los años de los mismos niños y niñas permite conocer qué está pasando con la infancia y así tener antecedentes claros para enfocar conversaciones sociales. “Los resultados de ELPI no deberían ser solo una conversación de Gobierno, sino que deberían involucrar a diferentes actores, para que todos entendamos qué está pasando con los niños, niñas y adolescentes. Deberíamos ser capaces de traducir los resultados a cualquier lenguaje de esta sociedad, porque necesitamos al sector privado, a las familias y a todos los actores de la sociedad. La ELPI es una herramienta que nos permite fortalecer los derechos de niños, niñas y adolescentes en Chile”, enfatizó Glayson Dos Santos, Representante Adjunto de UNICEF Chile.

 

En el encuentro también expuso la Defensoría de la Niñez, institución que dio cuenta de la relevancia de esta encuesta para sus observaciones como organismo que vela por el respeto de los derechos humanos de los niños, niñas y adolescentes en nuestro país. Al respecto, Pamela Meléndez, directora de la Unidad de Estudios, Publicaciones y Estadísticas de la Defensoría de la Niñez, señaló que “un pilar fundamental que nos muestra la ELPI es cómo la familia, como garante de los derechos, es importante, pero también cómo la política apoya esas instancias de cuidado y desarrollo para la niñez y adolescencia”.

 

En esta cuarta ronda, la recopilación de datos estará a cargo del Centro de Microdatos de la Universidad de Chile, unidad que valoró ser parte de la realización de esta encuesta. "Como Centro de Microdatos, implementar y llevar a cabo el trabajo en terreno de la ELPI significa enfrentarnos nuevamente al desafío de cumplir una labor que nos llena de orgullo. Es nuestra forma de contribuir al desarrollo del país, porque sabemos la importancia de hacer un buen trabajo, pues sus consecuencias tendrán efectos concretos en el diseño de las políticas públicas que garanticen el pleno desarrollo de las generaciones futuras", dijo Lorena Flores, directora ejecutiva del Centro de Microdatos de la U. de Chile.

 

En sus distintas rondas, la ELPI ha entregado información valiosa para fundamentar en parte la política de infancia, incluyendo, por ejemplo, durante su Tercera Ronda de 2017, la Escala de Disciplina Infantil extraída de la Encuesta de Indicadores Múltiples por Conglomerados de UNICEF. A partir de su análisis, se pudo establecer que 6 de cada 10 niños, niñas y adolescentes de 5 a 12 años enfrentan algún tipo de disciplina violenta -de carácter psicológica o física- por parte de sus personas cuidadoras. Estos y otros indicadores resultan de gran importancia para el monitoreo del quehacer del Estado respecto de sus intervenciones y políticas dirigidas a la infancia y adolescencia.

 

El trabajo de campo de la Cuarta Ronda de ELPI incluye entrevistas con los y las adolescentes de la muestra de 2010 y la persona responsable de su cuidado, a quienes se les aplica un cuestionario y un set de evaluación. El levantamiento de datos comenzará el próximo miércoles 22 de mayo en todas las regiones del país y finalizará a inicios de noviembre de este año. Los resultados de esta ronda, que se espera puedan estar disponibles el próximo año, pretenden informar a la política pública actual y futura, orientada a la infancia.